IX. ECUADOR
1) ORACIÓNES A NUESTRA SEÑORA DE LA REPRESENTACIÓN DE
EL QUINCHE, PATRONA DE ECUADOR
44. Virgencita de El Quinche firme tutela de los Desamparados y esperanza de los pobres hijos
tuyos por el precioso Niño Jesús que llevas en tus brazos recibe el mensaje de nuestro amor,
y danos la gracia de no olvidarte jamás en las variadas circunstancias de nuestra vida y sobre todo
concédenos la dicha de expirar pronunciando tu Santo Nombre bajo tu maternal mirada. Así sea.
45. Oh Jesús Salvador nuestro que quisiste que tu Madre, la Gloriosísima Virgen María, fuera
venerada en la hermosa imagen de Nuestra Señora de El Quinche; concédenos ser bondadosos
cristianos de tan Santa Madre y Reina, cuyas alabanzas esperamos cantar en el cielo.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
http://www.quito.com.ec/fiestasquito/2008/tour10.php
2) ORACIONES A NUESTRA SEÑORA DEL CISNE, EN LOJA,
PATRONA DE ECUADOR
46.
Tú, que no abandonaste jamás al que te invoca, consoladora
de afligidos, protectora especial de las almas afligidas.
Cuando venga a decirte mis dolores, a confiarte mis penas
y a derramar a tus plantas lágrimas al recuerdo de los míos
que sufren, de los que amo, de aquellos que la muerte ha arrebatado.
En mi última agonía, en este terrible paso del tiempo a la eternidad
tú eres mi esperanza, Madre mía acuérdate de mí. Así sea.
47. Oh Dios que quisiste que tu madre la gloriosísima virgen María,
fuera venerada en la hermosa imagen, de Nuestra Señora del Cisne,
concédenos, bondadosa, que sepamos imitar siempre en este mundo
el testimonio cristiano de aquellos cuyas alabanzas merezcamos
cantar en el cielo. Amén
http://www.fasimur.es/virgen/historia.htm
48. NOVENA A NUESTRA SEÑORA DEL CISNE
PATRONA DEL ECUADOR, EN LOJA
Oración preparatoria
Soberana protectora nuestra, ¡Madre de todas las virtudes!
¡Virgen sin mancha! Rendidos humildemente a vuestras plantas,
llenos de fe en vuestro patrocinio, imploramos vuestro favor y
el auxilio de las gracias celestiales, para hacer de modo debido
esta novena de la cual esperamos sacar, provecho de nuestras almas
la enmienda para lo futuro, el perdón y la misericordia para la hora
de nuestra muerte. Amén.
Oración para todos los días
Salve Reina misericordiosa de los
cielos y la tierra, que bajo la
advocación del Cisne habéis querido protegemos tan especialmente,
haciéndonos el objeto de señalados favores y gracias particulares.
Bendecidnos como Madre amantísima, ya que os habéis dignado
escoger nuestro territorio para uno de los santuarios de vuestro culto
y asilo de los que os aman y vienen a buscar el consuelo de sus
aflicciones y necesidades, acogiéndose a vuestro amparo.
¡Bendecidnos! Vos sois nuestra salud, nuestra paz y alegría;
Vos sois la luz de nuestro cielo, el rocío de nuestros campos,
la esperanza de nuestra salvación. Bajo vuestras plantas las
sementeras se cubren de flores y de frutos, ante vuestra presencia
los estériles yermos se fecundan y a vuestro paso se alegran y
vivifican los valles y las colinas.
Bendecid, divina Pastora, los rebaños del campesino, las labores
del agricultor, las faenas y labranzas para que la tierra produzca
las cosechas necesarias, el pan de cada día para vuestros hijos.
Bendecidnos, conservando la inocencia de nuestros niños, la pureza
de las vírgenes, la piedad de las matronas, la moralidad de las
costumbres, la devoción del pueblo, el reconocimiento cristiano
de las familias y la concordia doméstica.
Bendecidnos, no permitiendo que se turbe la paz pública, como
patrona singular de esta provincia y benefactora de la República
entera, apartando por vuestra misericordia los males de la guerra,
del hambre, de la peste y de los terremotos que tenemos
merecidos por nuestras gravísimas culpas y continuas reincidencias.
Aceptad benigna, el humilde homenaje de esta novena y los votos
de nuestro amor reverente, como una primicia filial de vuestro pueblo,
dignaos admitir las ofrendas y plegarias de los peregrinos que vienen
a vuestro templo a implorar socorro y daros gracias por los beneficios
que les dispensáis; a buscar a vuestros pies la tranquilidad, el consuelo,
la salud, el remedio de todos los males y amarguras que nos rodean en
este valle de lágrimas y publicar los prodigios de vuestro favor y los
portentos de vuestra eficacia.
Bendecidnos y que por vuestra intersección logremos ser exaltados
a la Jerusalén celestial a donde os rogamos nos conduzcáis para ser
dignos de vuestras alabanzas, por los siglos de los siglos. Amén.
Oración final
¡Oh María! Vos sois llamada nuestra abogada, nuestra mediadora,
nuestra reina porque por vuestras manos Dios ha resuelto
concedernos todas sus gracias. A Vos, pues, recurrimos. ¿Podréis
desecharnos? No: porque jamás habéis negado vuestra asistencia
al que os ha expuesto sus necesidades con toda la sinceridad del
corazón. Con esa confianza esperamos que nos protegereis a fin de
que podamos llegar al feliz término de nuestra peregrinación en este
mundo. Amén.[2]
http://www.santuariodelcisne.org/joomla/index.php?option=com_content&view=article&id=56&Itemid=37
3) ORACIONES A LA VIRGEN DOLOROSA DEL COLEGIO,
EN QUITO
49. ¡Oh Santísima Virgen, Dolorosa del Colegio, Patrona
de la educación católica del Ecuador, protege a nuestra niñez
y nuestra juventud y mantened en ellos la fe incontaminada.
Dad a los padres de familia la libertad de escoger para sus hijos
la educación católica en los establecimientos fiscales;
que el Legislativo apruebe la ley de libertad de enseñanza
para los colegios estatales!
Proteged también a nuestras ciudades de la costa de las terribles
inclemencias de la naturaleza, que azotan a sus habitantes
en estos días. Madre dolorosa al pie de la Cruz, Madre espiritual
de todos los hombres, Madre espiritual de los ecuatorianos,
os agradecemos todos los beneficios de la Redención, y también
por estos casi 100 años de favores, recibidos a través de vuestra
advocación de la Dolorosa del Colegio. Animo a todos los
ecuatorianos para que amemos a la Virgen Santísima, filialmente
y constantemente.
http://www.corazones.org/maria/america/ecuador.htm
50. ¡Oh Madre Dolorosa! Por tus
lágrimas, por la corona de espinas,
por los clavos que llevas en tus manos, por las espadas de dolor
con que nuestros pecados traspasaron tu corazón; vuelve a
nosotros esos tus ojos misericordiosos y alcánzanos de tu hijo
Santísimo, dolor intenso de nuestras culpas y vivos sentimientos
de fe, esperanza y caridad. ¡Oh Madre Dolorosa! proteje a la Santa
Iglesia, proteje a nuestra Patria ¡Ampara a la
juventud! ¡Ampara
a la niñez! Amén.
http://dolorosadelcolegio.blogspot.com/
51. Virgen de la Dolorosa
Déjame pasar la vida a tu lado, Madre mía.
acompañando tu soledad amarga y tu dolor profundo. Déjame sentir
en el alma el triste llanto de tus ojos y el desamparo de tu corazón.
No quiero en el camino de mi vida saborear las alegrías de Belén
adorando en tus brazos virginales al niño Dios. No quiero gozar
en la casita de Nazareth de la amable presencia de Jesucristo no
quiero acompañarte en tu asunción gloriosa entre coros de
Ángeles. Quiero en mi vida, las mofas y burlas del calvario; quiero
la agonía lenta de tu Hijo; el desprecio, la ignominia, la infamia de
la cruz, quiero estar a tu lado virgen Dolorosísima; fortaleciendo mi
espíritu con tus lágrimas, consumando mi sacrificio con tu martirio,
sosteniendo mi corazón con tu soledad, amando a mi Dios y tu Dios,
con la inmolación de mi ser. Amén
http://www.mariologia.org/oracionalavirgendolorosa.htm
52. NOVENA A LA VIRGEN DE LOS DOLORES
Oración para todos los días
Señora y Madre nuestra, ¡Oh! Virgen Dolorosa, aquí estamos tus hijos
que queremos compartir tus dolores y sufrimientos, compartiendo
los dolores y sufrimientos de todos nuestros hermanos y hermanas.
Vuelve, otra vez, tus ojos de misericordia a nuestra patria dolorida
y sufrida, especialmente a los niños y jóvenes, mira sus dolores
y sufrimientos por la pobreza, fruto de la injusta distribución de la
riqueza que tenemos, porque se les cierra, así, el futuro a sus vidas.
Haz que, nosotros tus hijos, podamos mirar esta realidad a través
de tu mirada, para que nos unamos como país, y juntos, nos esforcemos
para solucionar los dolores y sufrimientos de nuestros hermanos que
son tus dolores y sufrimientos. ¡Oh! Madre Dolorosa, intercede por
nosotros ante tu Hijo y ante el Padre y alcánzanos la gracia de ser
un país de esperanza en donde todos tengamos la posibilidad de
gozar de una vida digna, de una educación de calidad para todos,
bajo tu mirada de Madre. Amén.
Oración final
¡Oh Madre Dolorosa!
Por tus lágrimas, por la corona de espinas, por los clavos que llevas
en tus manos, por las espadas de dolor con que nuestros pecados
traspasaron tu corazón; vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos
y alcánzanos de tu Hijo Santísimo dolor intenso de nuestras culpas
y vivos sentimientos de fe, esperanza y caridad.
¡Oh Madre Dolorosa! Protege a la Santa Iglesia, protege a nuestra
Patria, ampara a la juventud, ampara a la niñez. Amén.
Primer día
Objetivo de este día:
Sensibilizarnos ante el dolor de las madres de muchos
niños y niñas que no tienen acceso a la educación.
Ayúdanos, Oh Madre Dolorosa, a sentir dolor y confusión contigo
frente a tantos hermanos desamparados. Ayúdanos a remediar,
con nuestro esfuerzo, tales situaciones.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Segundo día
Objetivo de este día:
Revisar nuestras actitudes que no contribuyen al
proyecto de amor de Dios, que quiere que todos ten-
gamos una vida digna.
Oh Madre Dolorosa! dame luz y gracia para reconocer mi
responsabilidad en el pecado del mundo. Ese
pecado que atraviesa
de dolor tu corazón de Madre. Ayúdame a aliviar tu dolor,
aliviando las necesidades de mis hermanos, tus hijos queridos.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Tercer día
Objetivo de este día:
Que podamos mirar la realidad que nos rodea con
los ojos de María, sobretodo la pobreza y miseria que
nos aqueja.
Préstanos, María, tus ojos de Madre. Que sepamos mirar a través
de ellos las necesidades de los demás. Y salir en su auxilio.
Madre Dolorosa, vuelve tu mirada a los hombres que mueren de
hambre, mientras sumas ingentes son empleadas en armas; mira
el indecible dolor de los padres que asisten a la agonía de los hijos
que piden el pan que no tienen y que podría ser proporcionado aun
sólo con una pequeña parte de los gastos hechos en sofisticados
medios de destrucción, mediante los cuales se hacen cada vez más
amenazadoras las nubes que se condensan sobre el horizonte de la
humanidad. Escucha, oh Madre, el grito de paz que se eleva de las
poblaciones atormentadas por la guerra, y habla al corazón de
cuantos pueden contribuir a través de la negociación y el diálogo,
a soluciones equitativas y dignas de las tensiones actuales. Mira el
camino ansioso y atribulado de tantas personas que luchan por
procurarse los medios de subsistencia, por progresar y elevarse.
Mira las angustias y los sufrimientos que desgarran los ánimos de
cuantos se ven obligados a un forzado alejamiento de las propias
familias o viven en una familia separada por el egoísmo o la
infidelidad; de cuantos están sin trabajo, sin casa, sin patria,
sin amor y sin esperanza. Mira a los pueblos que están sin alegría
y sin seguridad, porque ven conculcados sus derechos fundamentales;
mira nuestro mundo actual, con sus esperanzas y desilusiones,
con sus entusiasmos y vilezas, con sus nobles ideales y sus
humillantes compromisos. Mueve las personas y los pueblos a romper
el muro del egoísmo, de la potencia y del odio, para abrirse al respeto
fraterno hacia todo hombre, cercano o lejano, porque es hombre,
porque es hermano en Cristo. Induce a cada uno a dar la ayuda
suficiente a quien se encuentra en necesidad ,a entregarse al bien de
todos, a renovar su corazón en la gracia de Cristo Redentor.
Protege a tu Iglesia en su prodigarse por lo pobres, los marginados
y los que sufren. Guarda y refuerza en todos los corazones el anhelo
de fe en Dios y de bondad hacia los hermanos; la búsqueda de la
presencia de Dios y de su amor, la confianza en su poder redentor
y salvador, la confianza en su perdón y el abandono en su providencia.
Juan pablo II. 25 de diciembre de 1983. (adaptación)
Cuarto día
Objetivo de este día:
Que sintamos el dolor solidario de nuestros
hermanos,
los más pequeños ,que sufren por nuestros egoísmos y complicidades
en las injusticias.
Aviva, Madre, el dolor de nuestros corazones, a imagen de tu dolor.
Que de nuestra conversión verdadera al plan de Dios, nazca una
ciudad y un país nuevos.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Quinto día
Objetivo de este día:
Que nos comprometamos más con nuestra fe,
llevándola a la práctica
al ejemplo de María.
Oh Madre Dolorosa, aviva nuestra fe al ejemplo de la tuya,
para que pongamos en práctica lo que creemos y podamos ser
verdaderamente elogiados por tu Hijo.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Sexto día
Objetivo de este día:
Ser testigos del Evangelio de Jesús trabajando en la
construcción de un mundo más justo, más humano,
de acuerdo con el proyecto de Dios.
Ayúdanos, oh Madre Dolorosa, a ser fieles testigos del Evangelio
de tu Hijo ante todos nuestros hermanos, particularmente
los más necesitados, y ser así verdaderos miembros de tu Iglesia.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Séptimo día
Objetivo de este día:
Que busquemos responsablemente el bien de nuestra patria,
de manera que nadie quede excluido.
Oh Madre Dolorosa! Protege a nuestra Patria, para que todos
tus hijos podamos vivir en ella con igual dignidad y derechos.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Octavo día
Objetivo de este día:
Dejarnos interpelar por la desorientación y el
sufrimiento de tantos
jóvenes y así trabajar por un mundo mejor para ellos.
Hoy como hace cien años ¡Oh Madre Dolorosa! Que sufres
de tantas injusticias nuestras, convierte nuestros corazones al tuyo
y danos la gracia de un compromiso efectivo, aquí y ahora,
por un mejor futuro para los jóvenes de nuestro país y
del mundo.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
Noveno día
Objetivo de este día:
Defender la vida en todas sus formas. Hacer que
en este mundo
de muerte, la vida tenga valor y triunfe.
¡Oh Madre Dolorosa! Danos entrañas de misericordia como las tuyas,
para proteger de verdad la niñez de nuestra patria y del mundo.
Petición de la novena. Tres Ave Marías y Gloria.
4) 53. ORACIÓN A LA VIRGEN DEL CERRO, DE MACHALA
¡Santísima Virgen del
Cerro Oh María Inmaculada!
desde esta montaña sagrada,.mírame con ternura y amor
y ruega al Padre Dios perdonar nuestros pecados.
Hoy me consagro a ti, te ofrezco mi
corazón,
para que tu hijo Jesús,
aumentando mi débil fe,
me dé alivio y salvación. Te ruego que intercedas
por el bien de mi familia, por el
Valle de Elqui entero
y por mi Patria
linda.
Protégenos de enfermedades,
terremotos y aluviones
y te ruego por Vicuña, que escuches sus oraciones.
Desde este Santuario bendito ayúdanos a participar
de los dones del Espíritu para
poder peregrinar
al encuentro contigo
en el cielo entero e infinito.
Amén
http://virgencitadelcerro.blogspot.com/
[1] La Virgen María en el Ecuador tiene varias advocaciones: La Dolorosa del Colegio en Quito, la Virgen del
Quinche en la provincia del Pichincha, la Virgen de la Elevación en Ambato, la Virgen de Agua Santa en Baños en el Tungurahua, la Virgen del Huaico en Guaranda, la Virgen del Cisne en Loja. La Inmaculada que es venerada en muchas parroquias y diócesis, la Virgen del Cajas en Cuenca, la Virgen Purísima de Macas en el oriente. Y en toda la costa la
famosa Virgen de la Merced.
[2] La historia y los ejemplos para cada día, en la web: http://portalfranciscano.org/index.php?option=com_content&task=view&id=76&Itemid=105